Existen dos tipos de fuentes principales:
Retinol de Fuentes animales: Se encuentra en alimentos de origen animal, especialmente en productos de hígado como el hígado de res, el aceite de hígado de bacalao y los huevos. Estas fuentes animales contienen retinol en forma de retinil ésteres.
Retinol de Carotenoides: Los carotenoides, como el betacaroteno, se encuentran en frutas y verduras de colores intensos, como las zanahorias, batatas, espinacas y mangos. El betacaroteno se puede convertir en retinol en el cuerpo.
Síntesis en laboratorio
La mayoría de los productos de cuidado de la piel que contienen retinol utilizan una forma sintética de este compuesto. El retinol sintético se produce en el laboratorio y es una opción más estable y predecible que las fuentes naturales.
Los productos cosméticos y dermatológicos suelen utilizar este ingrediente debido a su eficacia y seguridad en la aplicación tópica.
Es importante destacar que la forma sintética utilizada en productos de cuidado de la piel es segura y eficaz cuando se aplica adecuadamente.
Puede ayudar a mejorar la apariencia de la piel, reducir arrugas y líneas finas, y tratar problemas de la piel como el acné y la hiperpigmentación.