En la industria cosmética, muchas veces se confunde un ingrediente natural y sostenible. Pero, aunque un producto sea natural, no significa que su producción sea respetuosa con el medio ambiente.

Dado que todavía no hay reglas estrictas sobre cuándo se puede llamar a algo «natural» o «sostenible», estos términos realmente no dicen mucho. Sin embargo, en general se puede decir que los productos naturales están hechos (en gran parte) de ingrediente natural que se extraen directamente de la naturaleza y no se procesan o apenas se procesan. Un producto sostenible se produce y se utiliza de una manera que causa el menor daño posible a las personas, el medio ambiente y la sociedad. Los ingredientes de un producto sostenible pueden ser tanto naturales como sintéticos.

𝘌𝘫𝘦𝘮𝘱𝘭𝘰 𝘥𝘦 𝘪𝘯𝘨𝘳𝘦𝘥𝘪𝘦𝘯𝘵𝘦 𝙣𝙖𝙩𝙪𝙧𝙖𝙡 𝘯𝘰 𝘴𝘰𝘴𝘵𝘦𝘯𝘪𝘣𝘭𝘦: La mica natural, usada en cosméticos como sombras y brillos, a veces se extrae de minas con condiciones laborales injustas y provoca daños al medio ambiente, como contaminación del agua y suelo.

𝘌𝘫𝘦𝘮𝘱𝘭𝘰 𝘥𝘦 𝘪𝘯𝘨𝘳𝘦𝘥𝘪𝘦𝘯𝘵𝘦 𝘴𝘪𝘯𝘵é𝘵𝘪𝘤𝘰 𝙨𝙤𝙨𝙩𝙚𝙣𝙞𝙗𝙡𝙚: La mica sintética, es una mica creada de manera artificial, sin necesidad de extraerla de minas. Se fabrica usando procesos que no dañan el medio ambiente ni explotan a los trabajadores.

Veamos que se trata la Cosmética Natural y un ingrediente natural

La cosmética natural se refiere a productos de belleza (champús sólidos, cremas faciales, cuidados corporales, mascarillas capilares, etc.) formulados con un mínimo estricto de componentes sintéticos o artificiales .

En el ámbito de la belleza natural, las fórmulas se elaboran con ingredientes naturales o de origen natural, que comprenden un mínimo del 95% , según la norma ISO 16128. Los ingredientes son predominantemente de origen vegetal y también pueden estar certificados como orgánicos.

Sin embargo, si se encuentran en una proporción demasiado baja en la fórmula, no se permitirá la certificación “orgánica” en el producto terminado. Las formulaciones pueden incluir bases neutras como hidrolatos (aguas florales), manteca de karité y aceites vegetales.

Aunque no es un requisito obligatorio, los productos naturales para el cuidado de la piel están sujetos a las mismas regulaciones que cualquier otro producto para el cuidado de la piel , incluido el Reglamento (CE) n.º 1223/2009 y el Reglamento (UE) n.º 655/2013 en materia de declaraciones.

Cosmética sostenible

Las empresas de cosmética están impulsando procesos más ecológicos y cosméticos sostenibles para reducir la contaminación ambiental y las emisiones de gases de efecto invernadero.

Cada vez más consumidores son conscientes del impacto negativo de los productos en el medio ambiente, lo que da lugar al desarrollo de cosméticos sostenibles.

Las estrategias de sostenibilidad son ahora indispensables en la industria cosmética. Una ola de empresas emergentes y corporaciones de cosmética están aplicando las siguientes acciones para mejorar la sostenibilidad:

Fórmulas minimalistas y cosméticos sin agua
Embalajes ecológicos
Procesos más ecológicos y circularidad

Sostenibilidad y abastecimiento ético

Al reconocer la compleja interacción entre los ingredientes sintéticos y naturales, la sostenibilidad y la ética, es fundamental que la industria de la belleza adopte un enfoque más matizado en la obtención de ingredientes. Este enfoque no solo debe evaluar la seguridad y la eficacia de los ingredientes, sino que también debe tener en cuenta su huella ambiental y el impacto socioeconómico de su obtención.

La adopción de tecnologías que permitan la producción sostenible de ingredientes sintéticos puede ser un avance significativo. La biotecnología , por ejemplo, ofrece métodos prometedores para producir compuestos idénticos a los que se encuentran en la naturaleza sin la degradación ambiental asociada a la agricultura tradicional.

En el ámbito natural, apoyar las prácticas de agricultura regenerativa puede marcar una gran diferencia. Estas prácticas, centradas en restaurar los ecosistemas, mejorar la salud del suelo y aumentar la biodiversidad, pueden garantizar que el cultivo de ingredientes naturales agregue valor al medio ambiente en lugar de restárselo.

El papel de los consumidores y de la industria

A medida que los consumidores se informan mejor y exigen mayor transparencia, la industria de la belleza se ve obligada a escuchar y adaptarse. Los consumidores tienen el poder de impulsar el cambio apoyando a las marcas que priorizan la sostenibilidad, el abastecimiento ético y la responsabilidad social.

Al elegir los productos de forma inteligente, los consumidores pueden alentar a las empresas a invertir en prácticas sostenibles, abastecimiento ético y soluciones innovadoras que beneficien tanto a las personas como al planeta.

De la misma manera, las marcas de belleza tienen la responsabilidad de reevaluar sus cadenas de suministro, desde la obtención de materias primas hasta los procesos de fabricación y el envasado final. Es una oportunidad para que estas marcas den el ejemplo y demuestren que la belleza y la ética pueden ir de la mano.

¿Cómo identificar los cosméticos “naturales” o “sostenibles”?

Aunque muchos cosméticos afirman ser “naturales” u “orgánicos”, no todos ellos ofrecen garantías verificables de estas cualidades. Comprobar los ingredientes (lista INCI) en el envase puede ayudar a los consumidores a evaluar el grado de exactitud de dichas afirmaciones, pero no para todos los ingredientes, ya que declarar el origen del ingrediente (natural, petroquímico, etc.) no es un requisito legal.

La garantía del consumidor basada en criterios verificables está respaldada por estándares privados como diferentes sellos internacionales que ofrecen a los consumidores un punto de referencia para identificar fácilmente los cosméticos naturales y sostenibles que cumplen criterios estrictos y verificables vinculados a los procesos , la formulación y los ingredientes.

Los conceptos clásicos de «natural» o “sostenible» están evolucionando rápidamente. Hoy, el mercado ha ampliado estos conceptos como parte del esfuerzo por crear una industria cosmética más sostenible.

Como resultado, las prácticas limpias, naturales, sostenibles y libres de crueldad animal se están convirtiendo en los nuevos estándares de la industria.

Desde la obtención de ingredientes orgánicos hasta los proyectos de responsabilidad social, las marcas están reconsiderando por completo sus cadenas de suministro. Así pueden transmitir claramente un compromiso con la sostenibilidad y la seguridad a los consumidores, lo que satisface la demanda de la industria y los consumidores de una acción climática tangible.

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