Innovador ingrediente cosmético postbiótico para reducir el enrojecimiento tras el estrés externo y mejorar de la elasticidad de la piel. Te contamos todo en este artículo.
En un mundo a menudo abrumador, hay algo reconfortante en el uso de ingredientes tradicionales, probados y reconocidos en nuestro día a día. El efecto evidente y perceptible de un producto hará que un ritual reconfortante, ya sea externo o interno, se transmita de generación en generación.
Esto también se aplica a la bebida láctea fermentada kéfir, famosa en todo el mundo por sus efectos beneficiosos para la salud. El consumo regular de kéfir no solo es beneficioso para nuestro sistema digestivo, sino que también refuerza el sistema inmunitario a través de diversos péptidos bioactivos y exopolisacáridos producidos durante el proceso de fermentación, preservando un equilibrio interno que nos ayuda a soportar las influencias externas con mayor facilidad.
Con la rica historia del kéfir en mente, CLR ha fusionado la antigua tradición del kéfir con la biotecnología de vanguardia, para desarrollar un ingrediente activo revolucionario que mantiene la piel en equilibrio oxidativo. CefiraProtect CLR™ es un innovador ingrediente vegano fermentado para el cuidado de la piel que se basa en un lisado de Lactobacillus Kefiranofaciens, la principal bacteria de los granos de kéfir que produce el ingrediente de alto valor kéfiran.
Utilizando estas bacterias durante el proceso de fermentación, el poder equilibrante del kéfir puede traducirse en un efecto de apoyo para la piel, todo ello sobre una base vegana. Cultivar estas bacterias amantes de la leche de forma vegetal es, de todo, menos sencillo.
Durante muchas décadas, CLR ha sido reconocida por su excepcional experiencia en procesos de fermentación, especialmente en la conservación de lisados vegetales. Estos llamados postbióticos son conocidos por su alta eficacia, biodisponibilidad y tolerabilidad en aplicaciones para el cuidado de la piel.
Basándose en estos amplios conocimientos, CLR ha llevado a cabo la difícil tarea de permitir que un organismo produzca nutrientes valiosos fuera de su zona de confort biológico.
Nuestra piel y los exposomas
Cuando estamos fuera de nuestra zona de confort, nos enfrentamos constantemente a diversos factores externos que ponen a prueba tanto nuestro bienestar como nuestra piel. Estas influencias negativas como la radiación UV, el estrés, la contaminación ambiental, el sueño insuficiente y la mala alimentación se conocen colectivamente como el exposoma, un conjunto de condiciones a las que todo el mundo está inevitablemente expuesto.
A pesar de lo amplias y exhaustivas que puedan parecer estas influencias, en realidad afectan a la piel a nivel celular al estimular la formación de radicales libres, moléculas altamente reactivas que pueden provocar daños potenciales en la piel.
Fig. 1: Factores externos, resumidos bajo el término exposoma, que pueden tener un efecto negativo sobre el estado de la piel.
Autodefensa celular contra los radicales libres
La piel es increíblemente inteligente y suele ser capaz de neutralizar estos radicales libres, siempre que este proceso tenga lugar cuando la piel se encuentra en equilibrio oxidativo. Sin embargo, el equilibrio oxidativo no puede mantenerse si los factores de estrés externos se acumulan y la balanza se inclina hacia el estrés oxidativo. Una vez agotado el potencial antioxidante propio de la piel, es necesario apoyarla en su propia autoprotección, para que vuelva a ser capaz de cumplir su tarea real de actuar como primera barrera de nuestro organismo y mantener posteriormente su buen y radiante aspecto.
Fig. 2 El mecanismo de autodefensa celular propio de la piel para mantener el equilibrio oxidativo se agota en cuanto los factores externos del exposoma se acumulan y provocan estrés oxidativo. Como resultado, las propias proteínas de la piel se oxidan y su estructura y funcionalidad se ven alteradas.
Las biomoléculas, como las proteínas que sufren estrés oxidativo en la piel son principalmente el colágeno, la queratina, la elastina y las enzimas, entre muchas otras, se oxidan de forma incontrolada, lo que puede cambiar su estructura tridimensional de tal manera que su funcionalidad biológica se vea afectada.
Esto puede provocar irritación cutánea, una barrera debilitada, pérdida de elasticidad y firmeza y, en general, una piel comprometida que no puede funcionar correctamente. Con CefiraProtect CLR™, se potencian los propios mecanismos de autodefensa de la piel, lo que se traduce en la recuperación del equilibrio oxidativo y la protección proteica en todas las capas cutáneas y, por tanto, en una mayor calidad y resistencia de la piel.
La mejora del potencial antioxidante natural de la piel, que le permite protegerse y repararse a sí misma, también puede considerarse parte de un enfoque holístico más amplio: la agresión de los exposomas no cambiará, pero la respuesta de la piel sí lo hará.
Protección contra la oxidación de las proteínas en todas las capas de la piel
Para visualizar el efecto de CefiraProtect CLR™ a nivel celular, se estresaron explantes de piel humana con radiación UV-A hasta tal punto que se estimuló la formación de radicales libres, lo que provocó daños oxidativos en las proteínas. Estas proteínas pueden visualizarse mediante detección de fluorescencia en un microscopio de epifluorescencia.
Cuanto más intensa sea la señal de fluorescencia, mayor será la concentración de proteínas oxidadas tras la irradiación UV-A. En la piel no tratada, la piel parece un fuego ardiente. El elevado daño oxidativo es especialmente evidente en el estrato córneo y en la unión dermoepidérmica.
La dermis, donde se encuentran el colágeno y la elastina, también muestra altos niveles de proteínas oxidadas. Cuando el explante se trata con CefiraProtect CLR™, este «fuego oxidativo» no se produce. Las proteínas quedan protegidas en todas las capas de la piel al reducir significativamente la formación de radicales libres.
Fig. 3: Visualización in situ de la oxidación de proteínas en profundidad en explantes de piel humana tras la radiación UV-A.
Un estudio de simulación del exposoma sobre cómo la piel se calma más rápido para volver más fuerte
Posteriormente, se realizaron experimentos in vivo para confirmar que CefiraProtect CLR™ era capaz de mejorar la recuperación de la piel tras la exposición a un estrés relevante para el exposoma y sus efectos protectores, mejorando la resistencia de la piel frente al exposoma.
Durante la primera fase, la llamada «fase de irritación», no se aplicó ningún producto de prueba, pero la piel fue agredida dos veces al día con una solución de SDS (Sodium Dodecyl Sulfate) al 5% en agua durante un total de 7 días. Durante los 7 días siguientes, la «fase de tratamiento», la piel no se estresó con SDS, sino que se trató dos veces al día con productos de prueba (CefiraProtect CLR™ (3%), Placebo, Sin tratar).
En esta segunda fase, se investigó con qué rapidez disminuía y se calmaba el enrojecimiento provocado por el SDS con la aplicación del producto.
En la tercera y última fase, los productos de prueba se aplicaron dos veces al día. Una hora después de la aplicación de los productos de prueba, la piel se sometió de nuevo a una prueba con SDS al 5%. En esta fase, el objetivo era averiguar si el tratamiento influía en la nueva exposición al SDS y si los distintos tratamientos provocaban una diferencia en la resistencia de la piel.
El enrojecimiento de la piel se determinó con un Minolta Chromameter CR 400 (Minolta, Japón) utilizando el espacio de color CIELab. La piel irritada muestra un mayor componente rojo, que puede cuantificarse mediante el valor a*. Cada valor es la media de tres registros. El enrojecimiento de base se fijó en 0%.
Fig. 4: Reducción del enrojecimiento tras el estrés externo y mejora de la elasticidad de la piel.
Tras una fase de irritación con SDS, modelo de la influencia negativa del exposoma, la irritación cutánea, perceptible por el enrojecimiento de la piel, se regula más rápidamente con CefiraProtect CLR™ que con placebo/no tratado. Después de un estrés externo renovado a partir del día 14, la piel tratada con CefiraProtect CLR™ fue significativamente más resistente y se enrojeció un 50% menos en comparación con la primera respuesta al estrés después del día 7.
Esto significa que la piel no sólo es capaz de calmarse más rápidamente después de una irritación externa, sino que también se vuelve más robusta gracias al uso regular de CefiraProtect CLR™, este innovador ingrediente cosmético logrando que reaccione con menos fuerza al estrés futuro.
Este efecto duradero lo convierte en un compañero diario para el cuidado de la piel que ha demostrado reforzar la barrera cutánea en un 9,4%, mejorar la elasticidad en un 7% y mejorar la flacidez cutánea existente en un 16,9%.
Innovador ingrediente cosmético
A medida que las condiciones externas siguen desafiando a nuestra piel, podemos recurrir a la sinergia de la sabiduría antigua y la ciencia moderna. Al unir la rica tradición del kéfir con la biotecnología de vanguardia para los activos de origen vegetal, apoyamos a la piel para afrontar mejor estos retos, preservando su luminosidad juvenil y entrando en una nueva era de confort y resistencia.
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