Los recursos de biotecnología en el campo de la cosmética ha crecido considerablemente, a través de su uso para originar nuevos conceptos y productos y optimizar los procesos. Materias primas como enzimas, biopolímeros funcionales, productos obtenido por procesos fermentativos y tecnologías de ADN recombinante son cada vez más utilizado en el sector cosmético. Ahi es donde la demanda de este tipo de producto tiende a aumentar, ya que el consumidor es cada vez más exigente.
Bioprospección se define como la “búsqueda sistemática de organismos, genes, enzimas, compuestos, procesos y partes de seres vivos en general, que pueden tener un potencial económico y, eventualmente conducir al desarrollo del producto “. Tal término se expande a numerosas áreas, incluida la propia biotecnología y la industria cosmética. Por lo tanto, es una forma de obtener rentabilidad a través de la biodiversidad.
Cuando son obtenidas a través de procesos biotecnológicos, las enzimas son biotacatalizadores orgánicos de naturaleza proteica que aceleran las reacciones químicas en organismos.
El uso de enzimas cubre varias áreas, principalmente con respecto a procesos industriales. Las enzimas tienen ventajas sobre otros catalizadores debido a su bajo impacto ambiental. Además de ser más viable económicamente, su bajo consumo de energía y por tener un buen rendimiento financiero.
Principales enzimas utilizadas en Cosméticos
Entre muchas enzimas existentes de interés cosmético, la superóxido dismutasa (SOD), las lipasas y la proteasas resultan las más importantes.
Superóxido dismutasa
La exposición a la radiación ultravioleta ha promovido una tendencia del mercado en productos que mitigan el envejecimiento celular temprano y cambios en la piel. Los activos derivados naturalmente se utilizan por su capacidad de neutralización de especies reactivas de oxígeno. A través de la exposición sin protección, los radicales libres se sintetizan, siendo perjudiciales para el organismo.
La superóxido dismutasa (SOD) se clasifica como una metaloenzima que actúa sobre el radical superóxido. Esta enzima se considera la primera línea de defensa contra el estrés oxidativo. Actúa contra los oxiradicales que promueven el daño al organismo, controlando la aparición de especies reactivas de oxígeno, siendo esta una actividad de interés cosmético. Esto ya que puede aplicarse como activo en formulaciones para eliminar estas especies reactivas de oxígeno, responsable del envejecimiento de la piel.
Lipasas
Las lipasas tienen la capacidad de hidrolizar moléculas de triglicéridos, convirtiéndolos en diglicéridos, monoglicéridos, ácidos grasos libres y glicerol. Pueden ser procedentes de diversas fuentes aunque el origen microbiano es el más utilizado y bioprospectado. Industrialmente, las lipasas de origen microbiano son más interesantes debido a la facilidad de obtención. Además de tener un mayor estabilidad en relación con otras fuentes, con aplicabilidad múltiple, especificidad de sustrato y por tener bajo costo de producción.
En el sector cosmético, las lipasas tienen aplicabilidad tanto como ingredientes activos, como biocatalizadores para la formación de otros activos para hidrolizar moléculas de grasa. Así su uso se da en productos de limpieza como geles y champús, para el tratamiento de la piel y el cabello graso. También para la incorporación en formulaciones para el tratamiento de la celulitis, al descomponer los adipocitos.
Proteasas
Las proteasas consisten en un grupo de enzimas de importancia fundamental, que representa alrededor del 60% del mercado de enzimas industriales. Son responsables de la escisión de los enlaces peptídicos de las proteínas.
Tienen funciones variadas, que van desde el tratamiento de estrías, formulaciones depilatorias, exfoliaciones, entre otros. Las proteasas de microorganismos son las más utilizadas industrialmente, considerando las ventajas técnicas y económicas que presentan.
Las queratinasas son proteasas que tienen el potencial de degradación de la queratina. Tales enzimas tienen la capacidad de generar hidrolizados enzimáticos de queratina, además de otras aplicaciones, lo que hace posible su uso en el sector cosmético. Principalmente en casos como psoriasis, acné, eliminación de cicatrices y renovación celular. Estas enzimas actúan en proteínas fibrosas e insolubles, que contribuyen a la curación de la piel que ha sido sometida a algún tipo de lesión.
Las colagenasas son proteasas que actúan degradando el colágeno, a través de la hidrólisis de esta molécula, siendo altamente específica para ella.
Dado lo anterior, las enzimas son de gran importancia para el segmento cosmético, para presentar varias aplicaciones. Además de las ventajas de ser altamente específicas y permitir ahorros de proceso. La biodiversidad juega un papel fundamental en bioprospección enzimática, ya que es un marco de recursos que permite obtener estos por las más variadas fuentes.
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