El microbioma de la piel es un completo y complejo ecosistema que se organiza en comunidades que muestran una gran diversidad. Varían según el sitio del cuerpo, el anfitrión edad y sexo, dieta, genética, estado socioeconómico, geografía y exposición ambiental. La composición microbiana distintiva de los diferentes nichos corporales está relacionada con su participación en el cumplimiento de las funciones fisiológicas normales del huésped. La disposición de los microbios colonizadores se adaptan al entorno particular y presentan elementos metagenómicos para cumplir los requisitos.
Las acciones de la vida diaria dan forma al microbioma desde su inicio y pueden alterar su composición en todas las etapas de la vida. El microbioma humano muestra cierta resistencia al cambio y, en cierta medida, la capacidad de recuperar su composición de referencia después de una alteración. Pero fuerzas poderosas y selectivas pueden afectar el comportamiento del microbioma y dar lugar a alteraciones. Esto es particularmente evidente en la piel que está continuamente influenciado por variables químicas, biológicas y físicas que pueden afectar su estabilidad y composición. La exposición a estas variables puede ser temporal y de corta duración, como en el caso de los tópicos antisépticos y ungüentos, o repetitivos y duraderos, como la radiación ultravioleta (UV), telas, cosméticos, etc.
El microbioma de la piel sana
La piel humana es relativamente escasa en disponibilidad de nutrientes en comparación con otros órganos. Esto representa un hábitat menos que ideal para apoyar el crecimiento bacteriano. La presencia de sudor rico en sal y moléculas antibacterianas impone otro obstáculo. Sin embargo, la piel ofrece muchos nichos que difieren en sus propiedades físicas y químicas creando múltiples microambientes.
Una amplia gama de microorganismos pueden encontrar en la piel un nicho ecológico estable que ofrece condiciones de crecimiento adecuadas y los nutrientes necesarios.
El Proyecto del Microbioma Humano, iniciado por los Institutos Nacionales de Salud (NIH), dilucidó el microbioma sano de la piel humana. Los miembros del microbioma humano pertenecen a 19 bacterias, los más representados son Actinobacteria, Firmicutes, Proteobacteria y Bacteroidetes.
Disbiosis de microbioma
Cuando se somete a perturbaciones cortas aleatorias, el microbioma es capaz, hasta cierto punto, de permanecer intacto. Sin embargo, las presiones pueden provocar la desestabilización del equilibrio. Este fenómeno, conocido como disbiosis, describe un desequilibrio de la comunidad de microorganismos en o dentro de nuestro cuerpo. Se cree que la alta asociación entre las bacterias que constituyen el microbioma altamente organizado conduce a un efecto en cascada. Mediante el mismo, un cambio en una de las especies conduce a alteraciones en las otras. La disbiosis ha sido ampliamente estudiada en relación con varias enfermedades dérmicas, como dermatitis atópica (EA), acné y vitiligo.
Algunas teorías de dinámica microbiana atribuyen el cambio observado en los estados de disbiosis a la competencia de recursos y la interdependencia nutricional que conduce a cascadas tróficas. También a cambios de comportamiento provocados por factores externos o estímulos internos.
Influencias extrínsecas
Existen numerosas fuentes de factores extrínsecos que pueden dar forma al microbioma de la piel. La taza de exposición a largo o corto plazo, continuo o de una sola vez. La duración y la intensidad de la exposición también juega un papel en la conformación del microbioma.
Exposiciones de vida temprana
La colonización bacteriana en la piel humana comienza en el momento del nacimiento y continúa desarrollándose y remodelándose a lo largo de los primeros años de vida. Informes sobre colonización microbiana comenzando antes y durante el parto han sido revisados a fondo.
La dermatitis del pañal (DD) es una afección inflamatoria de la piel causada por la abrasión de alta frecuencia entre la piel de un bebé y la superficie del pañal. La piel afectada es altamente susceptible a microbios, infecciones, en particular a los residuos microbianos intestinales.
Productos cosméticos
Los cosméticos de hidratación de la piel son muy populares entre una gran proporción de la población. Se evaluaron los efectos de los cosméticos de hidratación en el microbioma de la piel del rostro en 30 voluntarios con tipos de piel seca a hidratada. El conjunto básico de hidratación incluía cuatro productos. Estos se aplicaron secuencialmente después del lavado facial, dos veces al día, durante cuatro semanas: un suavizante, una loción, una esencia y una crema. El uso de estos productos resultó en un aumento significativo de la diversidad bacteriana, independientemente del nivel de hidratación de la piel facial. En cuanto a la composición bacteriana, las comunidades encontradas en ambos tipos de piel eran diferentes antes y después del uso cosmético para todos los participantes. La variabilidad se relacionó más con las diferencias interpersonales que con el nivel de hidratación de la piel.
Agentes antimicrobianos
Los agentes antimicrobianos se usan con la intención de evitar o reducir las infecciones causadas por microorganismos. Evidencia creciente de la relevancia del microbioma para la fisiología humana ha llevado a un cambio de paradigma. Los microbios y la colonización bacteriana ya no son percibidos estrictamente como amenazas. Como resultado, los efectos de la ingesta de antimicrobianos no específicos en comunidades bacterianas residentes ahora se está reconsiderando. Esto se debe a que también afectan a miembros benéficos y comensales.
Agentes a base de bacterias
Los probióticos fueron definidos como “microorganismos vivos que cuando se administran en cantidades adecuadas confieren un beneficio para la salud del huésped ”. El uso de probióticos ha sido probado para reducir la frecuencia de infección y el uso de antibióticos. En particular, los investigadores demostraron su eficacia en el tratamiento de afecciones de la piel como la EA y el acné vulgar. Posiblemente debido a su contribución a la inhibición del crecimiento de patógenos de la piel y la promoción de un equilibrio.
Los probióticos no solo son eficientes para el tratamiento de afecciones de la piel. También se usan para mejorar sus propiedades fisicoquímicas (hidratación, elasticidad, producción de melanina, etc.) y del sistema inmune.
El campo del microbioma está en intenso estudio, integrando el conocimiento de varios campos.
Las características complejas del microbioma, combinadas con las interacciones inminentes entre los ecosistemas microbianos y el huésped hacen que la elucidación completa del microbioma humano sea una tarea complicada. El Proyecto de Microbioma Humano de NIH ha superado el desafío, reuniendo esfuerzos interdisciplinarios para dilucidar los mecanismos detrás del microbioma. Así estudiar su impacto en la salud y enfermedad humana, así como proporcionar recursos para promover el progreso en el área.
